Ciberacoso (también llamado ciberbullying en la traducción al
inglés) es el uso de información electrónica y medios de comunicación
tales como correo electrónico, redes sociales, blogs, mensajería instantánea, mensajes de texto, teléfonos móviles, y websites difamatorios para acosar a un individuo o grupo, mediante ataques personales u otros medios. Puede constituir un delito penal. El
ciberacoso es voluntarioso e implica un daño recurrente y repetitivo infligido a través del medio del texto electrónico.
Según R.B. Standler
el acoso pretende causar angustia emocional, preocupación, y no tiene
propósito legítimo para la elección de comunicaciones. El
ciberacoso
puede ser tan simple como continuar mandando e-mails a alguien que ha
dicho que no quiere permanecer en contacto con el remitente. El
ciberacoso puede también incluir amenazas, connotaciones sexuales, etiquetas peyorativas.